Si tienes un iPhone, seguramente sabes que repararlo no es una tarea fácil ni barata. Los precios de las reparaciones de los dispositivos de Apple son muy elevados en comparación con otras marcas, y muchas veces superan el valor del propio terminal. ¿Por qué el iPhone es tan caro de reparar? ¿Qué factores influyen en el coste de las reparaciones? ¿Hay alguna forma de ahorrar dinero al reparar iPhone?
La opinión de la marca
Una de las razones por las que el iPhone es tan caro de reparar es la opinión de la propia marca sobre sus productos. Apple considera que sus dispositivos son de alta calidad y que ofrecen una experiencia única a sus usuarios, por lo que no quiere que nadie más que ellos o sus proveedores autorizados los manipulen. De esta forma, Apple controla el mercado de las piezas y las herramientas de reparación, y establece unos precios muy altos para evitar que los clientes recurran a otros servicios técnicos no oficiales.
Además, Apple argumenta que sus dispositivos son muy complejos y que requieren de una formación y una certificación específicas para poder repararlos correctamente. Por eso, Apple ofrece una garantía limitada de un año para sus productos, y un servicio de AppleCare+ que amplía la cobertura a dos años y que incluye dos reparaciones por daños accidentales, previo pago de una tarifa. Pero hay que tener en cuenta que estos servicios no cubren todos los tipos de averías, y tampoco son baratos.
Las tecnologías originales y las piezas caras
Otra de las razones por las que el iPhone es tan caro de reparar es que utiliza tecnologías originales y piezas caras que no se encuentran fácilmente en el mercado. Por ejemplo, el iPhone cuenta con un sistema de reconocimiento facial llamado Face ID, que utiliza una cámara TrueDepth y un proyector de puntos para escanear el rostro del usuario y desbloquear el dispositivo. Esta tecnología es muy sofisticada y precisa, pero también muy delicada y costosa de reemplazar.
Asimismo, el iPhone tiene una pantalla OLED que ofrece una alta resolución, un alto contraste y unos colores vibrantes, pero que también es muy frágil y propensa a romperse. El precio de cambiar la pantalla de un iPhone puede variar según el modelo, pero en general es muy alto. Por ejemplo, reparar la pantalla de un iPhone 14 Pro Max cuesta 489 euros, mientras que reparar la pantalla de un iPhone 13 Mini cuesta 279 euros.
Otras piezas que también son caras de reparar son la batería, la cámara trasera, el altavoz, el micrófono, el botón de inicio, el conector de carga y el sensor de huellas. Todas estas piezas tienen un diseño específico para cada modelo de iPhone, y muchas veces están integradas o soldadas entre sí, lo que dificulta su extracción y sustitución. Además, algunas piezas tienen un código de identificación que las vincula con el dispositivo, y si se cambian por otras no originales, pueden provocar fallos o bloqueos en el sistema.
La dificultad de reparar el iPhone por uno mismo
Una posible solución para ahorrar dinero al reparar el iPhone sería hacerlo por uno mismo, comprando las piezas y las herramientas necesarias y siguiendo los manuales de reparación que ofrece Apple. Sin embargo, esta opción tampoco es muy recomendable, ya que reparar el iPhone en casa con las piezas que envía Apple es tan caro como llevarlo al servicio técnico.
Esto se debe a que Apple cobra unos precios muy altos por las piezas y las herramientas que envía a los clientes, y además no garantiza que la reparación sea exitosa. De hecho, si el cliente daña el dispositivo al intentar repararlo, Apple no se hace responsable y puede negarse a ofrecer una reparación posterior. Por otro lado, al reparar el iPhone por uno mismo, se pierde la garantía oficial y la posibilidad de acceder al servicio de AppleCare+.
La alternativa de los servicios técnicos no oficiales
Ante esta situación, muchos usuarios optan por recurrir a los servicios técnicos no oficiales, que ofrecen reparaciones más baratas y rápidas que Apple. Estos servicios técnicos suelen utilizar piezas compatibles o de segunda mano, que no son originales pero que funcionan correctamente. Además, cuentan con personal cualificado y con experiencia en reparar dispositivos de Apple, y ofrecen garantías de varios meses o incluso un año por sus reparaciones.
En cualquier caso, la mejor (y más barata) idea será siempre tratar de cuidar bien el dispositivo y evitar que se dañe, y en caso de que se averíe, valorar las opciones disponibles y elegir la que más se adapte a las necesidades y al presupuesto de cada uno.