La robótica es una rama de la ingeniería y la ciencia que se ocupa del diseño, construcción, operación y aplicación de robots. Combina diferentes disciplinas, como la electrónica, mecánica, informática e inteligencia artificial, para desarrollar sistemas robóticos capaces de realizar diversas funciones.
Aunque siempre se ha tratado como una carrera profesional, o al menos de educación superior, son cada vez los colegios que están introduciendo la robótica en la etapa formativa de los niños.
Se ha convertido en una de las herramientas de aprendizaje para fomentar el interés a conceptos como la ciencia, tecnología, ingeniería, informática y matemáticas.
La robótica educativa promueve el desarrollo de habilidades técnicas y transversales, así como el pensamiento crítico, la resolución de problemas y la colaboración en equipo.
Si estás pensando introducir la robótica en tu aula de clases, te recomendamos que nos acompañes. Te diremos las razones de agregar esta rama de la ciencia a tu planificación de clases y cómo hacerlo de manera práctica para despertar el interés de los estudiantes.
¿Listo? ¡Vamos a ello!
Qué es la robótica en el aula
La robótica en el aula, también conocida como robótica educativa, es la implementación de la robótica en los entornos educativos con el objetivo de fomentar las competencias pedagógicas de los estudiantes.
Este enfoque busca fomentar el STEM —conocimientos en tecnología, ingeniería y matemáticas— a través de la construcción, programación y manipulación de robots.
La robótica educativa permite a los estudiantes relacionarse y adquirir habilidades prácticas y teóricas mientras participan en proyectos de diseño y construcción de estructuras robóticas.
Son muchos los elementos pedagógicos que se estimulan, como la resolución de problemas, el pensamiento lógico, la creatividad y la colaboración en equipo.
Por qué introducir la robótica en el salón de clases
Son cada vez más los colegios que introducen la rama de la ciencia encargada de diseñar, construir e implementar robots tecnológicos a sus clases. Pero, ¿a qué se debe este furor?
Esto trae consigo muchísimos beneficios. Aquí te mencionamos las ventajas de enseñar robótica en clases:
- Es atractivo para los estudiantes. La robótica educativa tiene una fuerte capacidad de atracción para el alumnado, lo que volverá las clases más emocionantes y dinámicas.
- Es fácil de introducir la idea. Casi todos los niños saben qué son los robots. Lo conocen gracias a los libros, series de televisión, películas y juguetes. No es algo que te cueste presentar, ya que al menos reconocerán las estructuras robóticas. Con tal afinidad, trabajar la disciplina será más sencillo para fines pedagógicos.
- Fomenta la creatividad. La robótica obliga a los estudiantes a que piensen de manera creativa para diseñar y construir robots. Optimiza el funcionamiento motor y las soluciones efectivas.
- Contribuye al pensamiento resolutivo. La robótica educativa fortalece el área del cerebro encargado de identificar y solucionar problemas. También los empuja a buscar alternativas y tomar decisiones informadas en pro de lograr el cometido.
- Motiva al trabajo en equipo. Fomenta la colaboración, la comunicación efectiva y la capacidad de trabajar en equipo. Habilidades esenciales en la vida real y en el entorno laboral.
- Aumenta la confianza. Si los estudiantes consiguen el resultado final, que es crear un robot, les sumará confianzas en sí mismo.
¿Cómo introducir la robótica en el aula?
Antes de integrar la robótica a tus clases, es importante que tengas en cuenta la edad y las capacidades del alumnado. Ya que será clave para elegir el mejor sistema de enseñanza y aprendizaje.
También debes buscar el equilibrio. Los estudiantes deben entretenerse, pero también debe educar y fomentar los elementos mencionados anteriormente —como la creatividad, el pensamiento resolutivo y trabajo en equipo—.
En todo caso, te recomendamos, como todo en la vida, iniciar poco a poco. Dando pequeñas pinceladas y cimentar la base de la disciplina para apaciguar el miedo o desconocimiento de los alumnos.
Segundo, integra la robótica al currículo de clases. Vincúlalo con temas y conceptos que se estén enseñando en clases. Por ejemplo, explorar la física a través de la construcción de robots que se mueven o estudiar la ecología a través del diseño de robots que simulen un ecosistema.
Tercero, conviértelo en un proyecto de fin de curso o una evaluación importante para que los estudiantes vayan ganando experiencia y desarrollando sus potencias cognitivas.
Para sumar al punto anterior, y aprovechando la naturaleza grupal de la asignatura, organiza grupos de clases y debates sobre los modelos de robótica para trabajar otras áreas de clase, como la dicción, la comunicación, el debate y la moderación.
Cuarto, dispone de herramientas para enseñar robótica en las aulas de clase. En Internet encontrarás diferentes opciones de kits de robots educativos según la edad y el nivel de habilidad de tus estudiantes. Esto cubrirá la parte práctica de la clase.
Finalmente, si estás interesado en el mundo de los robots educativos, y quieres empaparte en el tema para poder impartir las clases adecuadamente, te recomendamos visitar el sitio web de Tibot. Hallarás información de primera mano sobre este tema para ampliar tus conocimientos.