Las conveniencias que tienen las partes involucradas, hacen un tanto más difícil el poder asegurar o no sí los coches eléctricos tienen menos accidentes, ya que para las compañías fabricantes, se encuentran a niveles similares o menores que los autos movidos por combustibles fósiles.
En cambio, para las aseguradoras, resulta mayor la tasa de accidentes. Las autoridades, aunque poseen registros púbicos de ello, no demuestran parcialidad a ningún bando, por lo cual han evitado realizar o demostrar estadísticas que podrían resultar tendenciosas.
Sí hacemos una recopilación exhaustiva de las notas periodísticas en medios tradicionales u online, notaremos que los coches eléctricos tienen menos accidentes que los vehículos tradicionales. Pero, de extrapolarse en base al número de unidades, la brecha de diferencia se acortaría y cerraría una matriz o media aritmética considerable.
Podemos suponer que, al ser una tecnología en crecimiento y que la adopción está apenas en su punto de inicio consolidado, las fallas sean admisibles y poco contabilizadas como accidentes de seriedad, salvo aquellas que hayan dañado a personas o animales. Eso hace que, se cree una especie de nivel de tolerancia.
Más lo cierto es que ya hay casos en que un abogado indemnizaciones ha presentado querellas extrajudiciales y judiciales tanto a propietarios como fabricantes o distribuidores, por los daños y perjuicios que dichos vehículos han ocasionado. O sea, se están sentando precedentes que podrían desencadenar demandas tardías, tomando en consideración la forma en que se llegó a dar un fallo favorable a la parte demandante.
Los coches eléctricos tienen menos accidentes
Nos toca sustentar lo que hemos recopilado y que resultan ser números positivos para la industria de autos eléctricos a nivel mundial, estando ya en vías a que sean por ley, los vehículos preponderantes en Europa, así como ya lo están siendo en Asia y Oceanía.
Los coches eléctricos tienen menos accidentes, pero los que poseen –en principio- derivan del funcionamiento único que éstos poseen, a los cuales tanto propietarios como mecánicos en formación, no les han tomado el modo.
Otro ítem destacado en los accidentes que se han de reconocer como propios de los coches eléctricos, es la automatización de los modelos para que funcionen sin conductor.
Los sensores especiales, no siempre logran discernir entre los objetos en movimiento o detenidos que rodean al vehículo en movimiento, al estar aparcando o al arrancar. Por igual, no determinan a ciertos cuerpos humanos y los asemejan con el pavimento, creando que sigan moviendo y amenacen la integridad de los peatones.
Pero, como han visto en el párrafo anterior, se refiere a los autos con conductor automático. Los coches eléctricos tienen menos accidentes cuando una persona le conduce de manera convencional.
Otro factor de riesgo, que crea perspicacia y se vuelve tendencioso, es que el equipo pierda energía en la vía. Aunque muchos tienen sistema de alerta al estar en condición de baja en la batería, el abuso del conductor por extender el camino, incluso buscando un centro de recarga, puede conducir a un apagado del vehículo en un lugar no conveniente. Y sí eso ha sido algo malo para los vehículos tradicionales, los eléctricos no son la excepción.
¿Y en el caso de los híbridos?
La fusión entre gasolina y eléctrico, ha sido considerada como la solución para ambos mundos y para brindar mejores contraprestaciones. Esto hace difícil decir que entren en el predio analizado sobre sí los coches eléctricos tienen menos accidentes, ya que no es fácil endilgarle a la zona eléctrica del vehículo, la culpa de lo que acontezca en detrimento del chofer, sus pasajeros, sus propiedades o a terceras personas, vehículos y demás cosas.
Al momento, la conclusión lógica es que sí existen los accidentes. Pero su tasa no es medible en base a la proporción en cada país, de este tipo de transporte, entre los usuarios. lo que se puede hacer es analizar las ventajas y mejoras de cada modelo y brindarles la misma oportunidad que a los vehículos a gasolina.
La tecnología de vehículos eléctricos está demasiado avanzada y técnicamente lista para asumir el rol de vehículo principal que el planeta entero le está exigiendo que tome.